Los filtros de aire MANN-FILTER son el destino final de todas las partículas contaminantes. No importa que sea polvo, polen, arena, hollín o incluso gotitas de agua – gracias al elevado grado de separación de la suciedad y la gran estabilidad mecánica, los filtros de aire MANN-FILTER separan incluso partículas microscópicas contenidas en el aire de admisión. Esto permite que la proporción combustible-aire sea la óptima, asegurando un rendimiento estable del motor.